La contratación de personal principiante se desaceleró significativamente en 2025, creando un panorama desafiante para los recién graduados universitarios de la Generación Z que se incorporan a la fuerza laboral. La promesa de que un título se tradujera directamente en una carrera estable comenzó a desvanecerse a medida que se intensificaba la competencia por menos puestos.
Esta desaceleración impactó las ganancias proyectadas para los nuevos graduados, y algunos analistas estiman una posible disminución del 15-20% en los salarios iniciales en comparación con los niveles anteriores a 2025. El número de personas de la Generación Z clasificadas como NiNis (Ni estudia, Ni trabaja) experimentó un aumento correspondiente, lo que generó preocupación por las consecuencias económicas a largo plazo.
El contexto del mercado para este cambio incluye la creciente integración de la inteligencia artificial y la automatización en diversas industrias. Algunos CEO, como los de Anthropic y Ford, expresaron públicamente su preocupación de que la IA represente una amenaza significativa para numerosos puestos de nivel inicial. Esta disrupción tecnológica añadió otra capa de complejidad a un mercado laboral ya de por sí desafiante.
Si bien algunos ejecutivos expresaron aprensión, otros ofrecieron una perspectiva más optimista. La CEO de AMD, Lisa Su, animó a la Generación Z a buscar activamente los problemas más difíciles, enfatizando que estos desafíos presentan las mayores oportunidades de aprendizaje, diferenciación y crecimiento profesional. La CEO de Accenture, Julie Sweet, destacó la curiosidad como una ventaja de liderazgo crucial en este entorno en evolución.
De cara al futuro, se espera que el mercado laboral siga siendo impredecible en 2026. Sin embargo, el consejo de los líderes empresariales sugiere que la Generación Z puede superar estos desafíos adoptando la adaptabilidad, cultivando la curiosidad, asumiendo la responsabilidad de sus carreras y buscando proactivamente oportunidades de crecimiento y desarrollo. La capacidad de adaptarse a las nuevas tecnologías y adquirir habilidades demandadas será crucial para el éxito en la economía impulsada por la IA.
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