El avance fue posible gracias al uso de luz láser para manipular el comportamiento de los átomos en una cavidad. Al controlar cuidadosamente la luz láser, los investigadores pudieron crear una situación en la que parte de la energía se utilizaba para realizar un trabajo útil, como cargar una batería cuántica, mientras que la otra parte se convertía en calor. Este logro es un paso significativo hacia adelante en el campo de la termodinámica cuántica, que busca entender cómo se aplican los principios termodinámicos a los sistemas cuánticos.

"Este es un gran avance en nuestra comprensión de la termodinámica cuántica", dijo el Dr. Enrique Sahagún, investigador de la Universidad de Basilea y autor principal del estudio. "Durante mucho tiempo, pensamos que era imposible separar la energía útil del movimiento aleatorio en los sistemas cuánticos, pero nuestros resultados muestran que esto no es el caso".

El descubrimiento se basa en el trabajo del Conde Rumford, quien en 1798 observó que el calor no es una sustancia física, sino una forma de energía que se puede generar a través del movimiento. Esta idea sentó las bases para el desarrollo de la termodinámica, que desde entonces se ha convertido en un principio fundamental de la física.

Las implicaciones de este avance son significativas, ya que podría llevar al desarrollo de nuevas tecnologías que puedan aprovechar y controlar la energía a nivel cuántico. Esto podría tener consecuencias de gran alcance para campos como la computación cuántica, la criptografía cuántica y la comunicación cuántica.

"Este avance tiene el potencial de revolucionar la forma en que pensamos sobre la energía y su relación con los sistemas cuánticos", dijo el Dr. Sahagún. "Podría llevar al desarrollo de nuevas tecnologías que puedan aprovechar y controlar la energía a nivel cuántico, lo que podría tener implicaciones significativas para una amplia gama de campos".

Los investigadores de la Universidad de Basilea están trabajando actualmente para desarrollar y perfeccionar su técnica, con el objetivo de aplicarla a problemas del mundo real. También están explorando las posibles aplicaciones de su descubrimiento, incluyendo el desarrollo de nuevas baterías cuánticas y otros dispositivos de captura de energía.

A medida que la investigación en este área continúa avanzando, es probable que veamos avances significativos en los próximos años. El descubrimiento de los investigadores de la Universidad de Basilea es un paso importante hacia adelante en este campo, y tiene el potencial de abrir nuevas avenidas de investigación y desarrollo en el futuro.