Levy enfatizó la necesidad de un enfoque integral que aborde los problemas subyacentes que impulsan el conflicto. Afirmó: "La siguiente fase requiere una comprensión más profunda de los agravios de ambas partes y una voluntad de ceder en posiciones largamente mantenidas". Destacó la importancia del desarrollo económico en Gaza, la mejora de las medidas de seguridad para Israel y un horizonte político para los palestinos.

El plan de paz de Gaza, implementado inicialmente a principios de 2025, tenía como objetivo establecer un alto el fuego e iniciar un proceso de reconstrucción y reconciliación. La Fase Uno se centró en la ayuda humanitaria inmediata y la reparación de infraestructuras. La Fase Dos, tal como se concibió, está destinada a abordar la estabilidad política y económica a largo plazo.

Sin embargo, persisten desafíos importantes. Levy reconoció la profunda desconfianza entre israelíes y palestinos, así como la influencia de los grupos extremistas. Señaló que los "actores externos", incluidas las potencias regionales y las organizaciones internacionales, desempeñan un papel crucial para facilitar u obstaculizar el progreso.

La entrevista también abordó el papel de la inteligencia artificial en el proceso de paz. Si bien la IA podría ayudar en áreas como el monitoreo de los acuerdos de alto el fuego y el análisis del sentimiento público, Levy advirtió contra la dependencia excesiva de la tecnología. "La IA puede ser una herramienta, pero no puede reemplazar la diplomacia humana y la necesidad de un compromiso directo", dijo. Explicó además que los algoritmos utilizados para la resolución de conflictos deben diseñarse cuidadosamente para evitar sesgos y garantizar la equidad.

De cara al futuro, Levy subrayó la urgencia de reanudar las negociaciones. Advirtió que no abordar las causas profundas del conflicto solo conduciría a una mayor inestabilidad y violencia. Los próximos pasos, según Levy, implican la creación de confianza a través de medidas que la fomenten y la creación de un marco para un acuerdo de paz sostenible. El Proyecto EE. UU./Oriente Medio, dijo, está comprometido a apoyar estos esfuerzos a través de la investigación, el análisis y las iniciativas de diplomacia de la Vía II.