Un hombre de Swansea paralizado en un accidente insólito está explorando cómo la inteligencia artificial podría ayudarle a caminar de nuevo. Dan Richards, de 37 años, sufrió una grave lesión medular durante un baño en la bahía de Langland en la víspera de Año Nuevo de 2023. Una ola le volteó, provocando que se golpeara la cabeza contra la arena.

Richards supo al instante que estaba paralizado. Inicialmente, los médicos creían que estaría postrado en cama. Sin embargo, desde entonces ha recuperado algo de movimiento en sus brazos y dedos. Ahora usa una silla de ruedas.

La tecnología de IA ofrece un rayo de esperanza. Richards ya ha experimentado caminar con asistencia de IA en ensayos en Gales y Alemania. Estos sistemas utilizan algoritmos para interpretar las señales cerebrales y estimular los músculos. Esto evita la médula espinal dañada.

Los exoesqueletos impulsados por IA son un campo en rápido desarrollo. Los investigadores están explorando interfaces neuronales avanzadas. Estas interfaces podrían permitir un movimiento más preciso y natural. La tecnología plantea cuestiones éticas sobre la accesibilidad y el futuro de la rehabilitación.

Richards está decidido a seguir explorando las terapias impulsadas por la IA. Espera recuperar más movilidad. Su caso destaca el potencial de la IA para transformar la vida de las personas con parálisis. Es fundamental seguir investigando y desarrollando.