Miles de documentos secretos rusos quedaron expuestos en línea. Un simple error tipográfico provocó la filtración masiva de datos. La información incluía registros médicos confidenciales y detalles de pasaportes. También se revelaron quejas de soldados rusos sobre la guerra en Ucrania.
La brecha ocurrió a principios de este año. Una persona que verificaba el estado de una queja ingresó un número incorrecto. En lugar de un error, accedió al archivo de otra persona. Esto reveló miles de quejas disponibles públicamente en el sitio web del defensor del pueblo ruso. Las primeras quejas datan de abril de 2025.
El periodista ruso Maxim Kurnikov, ahora en Berlín, fue alertado. Él y su equipo de Echo recopilaron las quejas accesibles. Los datos expuestos detallan abusos y coerción dentro del ejército ruso. El gobierno ruso aún no ha hecho comentarios.
Kurnikov huyó de Rusia después de la invasión de Ucrania en 2022. Ahora opera Echo, un medio de comunicación, desde Berlín. El incidente plantea serias dudas sobre la seguridad de los datos dentro de los sistemas gubernamentales rusos.
Aún se desconoce el alcance total del daño. Se están llevando a cabo investigaciones para determinar la fuente de la filtración. Expertos legales están analizando las implicaciones de esta brecha. El incidente destaca los riesgos de la mala gestión de datos en la era digital.
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