El desarrollo de la Nueva Ciudad Clark por parte del gobierno filipino en los terrenos de una antigua base aérea estadounidense está generando preocupación entre los residentes de la cercana comunidad de Sapang Kawayan, quienes temen ser desplazados antes de que puedan asegurar sus derechos sobre la tierra. El proyecto multimillonario de "ciudad inteligente", una iniciativa clave del presidente Ferdinand Marcos Jr., tiene como objetivo atraer inversión extranjera y aliviar la congestión en Manila, según funcionarios del gobierno.

La Nueva Ciudad Clark, ubicada a dos horas al norte de Manila en la antigua Base Aérea Clark, está concebida como un centro para el turismo y la inversión. Sin embargo, el rápido ritmo de desarrollo ha provocado ansiedad entre la comunidad indígena de Sapang Kawayan, que teme ser expulsada de sus tierras ancestrales antes de que puedan establecer formalmente la propiedad legal.

El gobierno considera que la Nueva Ciudad Clark es crucial para su estrategia económica. Los funcionarios han declarado que el proyecto creará empleos, estimulará el crecimiento económico y proporcionará un entorno urbano moderno y sostenible. La Autoridad de Conversión y Desarrollo de Bases (BCDA), la agencia gubernamental que supervisa el proyecto, ha enfatizado su compromiso con un desarrollo responsable e inclusivo.

Sin embargo, los residentes de Sapang Kawayan expresan su preocupación por la falta de títulos de propiedad formales y el potencial de desplazamiento. Argumentan que su comunidad ha ocupado la tierra durante generaciones y que sus derechos deben ser reconocidos y protegidos. Asegurar estos derechos, dicen, está resultando difícil en medio del rápido desarrollo.

La BCDA ha declarado su intención de trabajar con las comunidades locales para abordar sus preocupaciones y garantizar que el desarrollo beneficie a todos los interesados. La agencia también ha dicho que está comprometida a proporcionar asistencia para la reubicación y oportunidades de sustento para aquellos que puedan verse afectados por el proyecto. Sin embargo, algunos residentes siguen siendo escépticos, citando experiencias pasadas con proyectos de desarrollo que han llevado al desplazamiento y la marginación de las comunidades indígenas.

La situación pone de relieve los complejos desafíos de equilibrar el desarrollo económico con los derechos y las necesidades de las comunidades locales. El resultado en Sapang Kawayan podría sentar un precedente para futuros proyectos de desarrollo en Filipinas y la región. La capacidad del gobierno para abordar las preocupaciones de la comunidad y garantizar su participación en el proceso de desarrollo será fundamental para el éxito y la sostenibilidad de la Nueva Ciudad Clark.