El 30 de diciembre de 2025, dos trenes chocaron frontalmente en la vía férrea que conduce a Machu Picchu en Perú, lo que provocó la muerte de una persona y heridas a docenas más. La agencia ferroviaria Ferrocarril Transandino informó que la colisión ocurrió alrededor de la hora del almuerzo en la línea de vía única que conecta Ollantaytambo y Machu Picchu. Los trenes involucrados eran operados por PeruRail e Inca Rail.
El fallecido fue identificado como el conductor de uno de los trenes, según la fiscalía de Cusco, la ciudad más cercana a Machu Picchu. Un funcionario de salud confirmó las lesiones y que los esfuerzos de rescate estaban en marcha.
El incidente plantea preocupaciones sobre los protocolos de seguridad en la línea ferroviaria que sirve a Machu Picchu, un importante destino turístico. El sistema de vía única, aunque potencialmente eficiente, aumenta inherentemente el riesgo de colisiones frontales si se producen fallas en la señalización o la comunicación. Es probable que la investigación se centre en determinar la causa de la colisión, incluido un posible error humano, una falla mecánica o un mal funcionamiento de la señalización.
El accidente pone de relieve los desafíos de la gestión de la infraestructura de transporte en zonas remotas y geográficamente complejas. El ferrocarril es crucial para el transporte de turistas y suministros a Machu Picchu, pero su ubicación presenta desafíos logísticos y de seguridad.
La investigación del accidente está en curso. Las autoridades ferroviarias han suspendido el servicio en el tramo afectado de la línea, lo que repercute en el turismo y el transporte local. Se están explorando opciones de transporte alternativas para minimizar las interrupciones. Aún está por verse el impacto a largo plazo en el turismo a Machu Picchu, pero es probable que se implementen mejoras de seguridad y medidas preventivas para restaurar la confianza en el sistema ferroviario.
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