Las hospitalizaciones debidas a la influenza casi se han duplicado en la última semana. Según los CDC, más de 19.000 pacientes con influenza fueron ingresados en hospitales la semana pasada, un aumento significativo con respecto a los aproximadamente 10.000 de la semana anterior.

El rápido aumento de casos preocupa a los funcionarios de salud, especialmente a medida que terminan las fiestas y la gente regresa al trabajo y a la escuela. Los CDC señalan que, si bien el virus llegó como se esperaba, la velocidad a la que aumentan los casos es más rápida en comparación con años anteriores.

Los expertos en salud recomiendan varias medidas preventivas para combatir la propagación de la gripe. Estas incluyen vacunarse, practicar una buena higiene de manos y quedarse en casa cuando esté enfermo. Los CDC enfatizan que, incluso si la vacuna no es una coincidencia perfecta con las cepas circulantes, aún puede reducir la gravedad de la enfermedad y prevenir complicaciones graves.

El aumento repentino de casos de gripe no solo está afectando a las personas y las familias, sino que también está ejerciendo presión sobre el sistema de atención médica. Los hospitales están informando un aumento en el volumen de pacientes y algunos están experimentando escasez de camas y personal. Los CDC están trabajando en estrecha colaboración con los departamentos de salud estatales y locales para monitorear la situación y brindar apoyo.

La actual temporada de gripe es un recordatorio de la importancia de las medidas de salud pública y la responsabilidad individual para prevenir la propagación de enfermedades infecciosas. Los funcionarios de salud continuarán rastreando la actividad de la gripe y proporcionarán actualizaciones a medida que avance la temporada.