Noticias de última hora: Explosión sacude una mezquita concurrida en Nigeria
Una devastadora explosión arrasó una mezquita en Maiduguri, la capital del estado de Borno en el noreste de Nigeria, matando y hiriendo a varias personas que se habían reunido para sus oraciones vespertinas el miércoles 24 de diciembre, aproximadamente a las 6pm (17:00 GMT). La explosión ocurrió en el mercado de Gamboru de la ciudad, según testigos presenciales y informes de las agencias de noticias Reuters y AFP.
La explosión tuvo lugar durante la sesión de oración vespertina, dejando un rastro de destrucción y caos a su paso. El portavoz de la policía Nahum Daso confirmó el incidente y declaró que un equipo de artificieros fue enviado al lugar para investigar y neutralizar cualquier amenaza potencial. Sin embargo, el número exacto de víctimas sigue sin estar claro, con informes contradictorios del líder de la mezquita Malam Abuna Yusuf y el líder de la milicia Babakura Kolo, citando al menos siete y ocho muertes, respectivamente.
Se están llevando a cabo esfuerzos inmediatos de respuesta y rescate, con los servicios de emergencia y las autoridades locales trabajando para evacuar a los heridos y brindar asistencia médica. El gobierno nigeriano aún no ha emitido una declaración oficial sobre el incidente.
Maiduguri ha sido azotada por más de una década de violencia vinculada a grupos armados, lo que hace que esta última explosión sea un recordatorio impactante de los desafíos de seguridad que enfrenta la región. La ciudad ha sido un punto caliente para las actividades terroristas, con numerosos ataques y bombardeos reportados en el pasado.
A medida que la situación sigue desarrollándose, la comunidad internacional está monitoreando de cerca los acontecimientos, con muchos pidiendo un aumento del apoyo y la cooperación para abordar las causas raíz de la violencia. El gobierno nigeriano ha prometido tomar medidas decisivas para restaurar la paz y la estabilidad en la región, pero el camino por delante será largo y desafiante.
La explosión en Maiduguri sirve como un recordatorio conmovedor del impacto devastador de la violencia en vidas y comunidades inocentes. A medida que el mundo se enfrenta a las complejidades del terrorismo y el extremismo, es esencial priorizar el diálogo, la comprensión y la cooperación para prevenir que se produzcan tragedias como esta en el futuro.
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