Cisco y Amazon priorizan la actitud y el entusiasmo por encima de las habilidades y la experiencia en la contratación, particularmente para los puestos de inicio de carrera. Este énfasis compartido, destacado por la jefa de Cisco U.K., Sarah Walker, y el CEO de Amazon, Andy Jassy, sugiere un cambio en las estrategias de contratación que valora las cualidades innatas por encima de las habilidades entrenables.

Walker, quien recientemente ascendió para liderar la división de Cisco en el Reino Unido e Irlanda después de una carrera de 25 años en BT, enfatizó que una actitud positiva y el compromiso son el "rasgo distintivo número 1" que busca en los candidatos. Este enfoque supera las credenciales del currículum vitae, especialmente para aquellos que comienzan sus carreras. BT, el gigante europeo de las telecomunicaciones Fortune 500 donde Walker anteriormente se desempeñó como directora del sector corporativo y público, reportó 14.210 millones de libras esterlinas (aproximadamente $17.700 millones de dólares) en ingresos. El enfoque de Cisco en la actitud refleja una tendencia más amplia en la industria tecnológica.

El énfasis en la actitud tiene implicaciones significativas para el mercado laboral. Sugiere que las empresas están cada vez más dispuestas a invertir en la capacitación de personas con la mentalidad adecuada, en lugar de depender únicamente de candidatos con habilidades preexistentes. Esto podría abrir puertas a personas de diversos orígenes que quizás no tengan las calificaciones tradicionales, pero que posean las habilidades blandas deseadas. Sin embargo, también plantea preocupaciones sobre posibles sesgos en el proceso de contratación, ya que la evaluación de la actitud puede ser subjetiva.

Cisco, un conglomerado tecnológico multinacional, ha estado adaptando estratégicamente su fuerza laboral para satisfacer las demandas cambiantes del panorama digital. Esto incluye no solo la adquisición de empresas con capacidades especializadas en IA, sino también el fomento de una cultura que valore la adaptabilidad y una mentalidad de crecimiento. El enfoque de la empresa en la actitud se alinea con la necesidad de empleados que puedan desenvolverse en un entorno tecnológico que cambia rápidamente.

De cara al futuro, es probable que la tendencia de priorizar la actitud en la contratación continúe, impulsada por la creciente importancia de las habilidades blandas en la era de la IA y la automatización. A medida que la IA se hace cargo de las tareas rutinarias, las habilidades humanas como la comunicación, la colaboración y el pensamiento crítico se vuelven aún más valiosas. Las empresas que puedan identificar y cultivar eficazmente estas cualidades en sus empleados estarán mejor posicionadas para tener éxito en el futuro.